La piel de vidrio es un cristal de efecto espejo ideal para utilizar en fachadas de edificios modernos. Es de montaje sencillo y gran versatilidad, puede alcanzar una estética final, dimensiones y resistencia, adaptables a una amplia variedad de diseños.

Estos cristales hacen el efecto de un espejo. Cuando alguien mira desde fuera se ve reflejado en ellos y no ve el interior. Por lo tanto por la noche, aunque tengamos este tipo de cristales seremos vistos.